Si de mantenimiento se trata, definitivamente es importante acudir con los representantes directos de la marca.
Si tu tienes alguna de estas marcas en tu proceso, confia en Grupo Rasch® ya que somos los representantes de las mismas en México.
Tu maquinaria de proceso ya sea que fabriques sólidos, líquidos, tu maquinaria de empaque o desde tu laboratorio requiere que se dé el mantenimiento para preservar su optimo funcionamiento.
Mantenimiento Predictivo, o mantenimiento con base en la condición, que se basa en la costante supervisión del equipo en funcionamiento y en la previsión de averías.
Cuando se detectan ciertas condiciones indeseables, se programa una reparación antes de la ocurrencia, antes de que el equipo, efectivamente, se averíe, eliminando, de este modo, la necesidad de mantenimiento correctivo oneroso o mantenimiento preventivo innecesario. Se basa en la condición física y operativa de los equipos a través de la supervisión regular y pruebas de la condición y rendimiento de los equipos, usando técnicas avanzadas como análisis de vibración, análisis de aceite, acústico, pruebas de infrarrojos o imagen térmica.
Mantenimiento Preventivo, que es el mantenimiento regular realizado de acuerdo con calendarios definidos, independientemente de la condición del equipo.
ocurre de modo cíclico y programado, independiente de la condición del activo y con el objetivo de evitar averías y minimizar las consecuencias de colapsos de equipos. La frecuencia es definida por el gestor de mantenimiento con base en una valoración de la vida útil del equipo y en las recomendaciones del fabricante. Ejemplos de acciones de mantenimiento preventivo incluyen revisiones periódicas, inspecciones, limpieza y lubricación de piezas.
En un claro ejemplo este podría ser como llevar tu carro al servicio, de acuerdo a lo estipulado en el momento de la compra.
Mantenimiento Correctivo, conocido también por mantenimiento reactivo o “funcionar hasta estropearse", este podría ser el ideal para equipos de baja prioridad, sin los cuales las operaciones de la empresa pueden seguir funcionando normalmente.
Lo mismo se aplica a equipos de bajo valor, ya que el trabajo necesario para realizar su mantenimiento o supervisión constante puede resultar más caro que la reparación o sustitución en caso de avería.
No debemos, sin embargo, confundir mantenimiento correctivo con mantenimiento de emergencia, que ocurren en diferentes fases de una avería. Mientras el mantenimiento correctivo se realiza en un momento en que determinado daño físico o alteración en el funcionamiento normal del equipo es evidente (o sea, un fallo funcional), el mantenimiento de emergencia, a su vez, ocurre después de una avería total del equipo, que exija mantenimiento urgente (y tiene, normalmente, costes más elevados).